16/05/2007

Somos una Asociación de artistas jovenes en edad, pero con vasta experiencia escénica inscrita en la filosofía de trabajo colectivo. Surguimos como Colectivo en el año 1987 a raiz de una propuesta pedagógica, el centro oriente Bogotano fué el vientre que nos acogió y permitió que en torno a la alternativa posible de expresar sentimientos, sensaciones y nociones del mundo por medio del teatro se encontraron un grupo de maestros y muchachos soñadores que construyeron su utopía. Los maestros por haber construido una alternativa para esos muchachos y los muchachos por haber construido un proyecto de vida y debido para cada uno de ellos, en medio de un clima de marginalidad y violencia.

Lo integramos jovenes de la localidad tercera, más exactamente en el barrio Atanasio Girardot, lo que implica que hacemos parte de la comunidad y desde allí desarrollamos nuestra labor artística, haciendo de ellla la fuente creativa de nuestras historias teatrales. Caracterizando la forma de realizar nuestro trabajo como actores artistas, sociales y politicos de nuestro entorno. Hablar de Luz de Luna es hacer referencia a diez años de labor Teatral sin descanso; es un punto de alusión a un quehacer en la investigación escénica enmarcada y enraizada en el trabajo comunitario, es hallar un punto de existencia en la ciudad de Bogotá.
En este ir y venir Luz de Luna se ha convertido en una escuela teatral, participando en las comparsas de la fiesta a Bogotá, festivales nacionales e internacionale siendo reconocido siempre por su trabajo de calidad y compromiso, dado que en la experiencia a creado y creído en el teatro como posibilidad de soñar y de construir el mundo. Pese a debilidades y dificultades se ha desarrollado a través de las fortalezas de cada uno de los individuos que hacen parte del proyecto.

En los inicios se trabajaron piezas de autor pero en la medida del tiempo y de la dinámica de desarrollo se llega a las construcciones colectivas, entendiendo esta creación como un hecho donde confluyen la comunidad de artistas y la comunidad del publico; es la busqueda del encuentro potencialmente creativo y transformador.

Nuestro quehacer escénico parte del contar historias que circundan en el entorno al cual pertenecemos, es una relación con la realidad para relfexionar sobre ella y crear un hecho artístico que trascende en la percepción del publico que nos acoge, permietiendo así quedar en la memoria y por sobre todo cultivar publico-espectador para el teatro.